En pleno corazón de la Costa Brava, en la preciosa vila marinera de Llafranc, se encuentra un bonito y tradicional hotel, con todo el encanto marinero. Se trata del Hotel Llevant, con ubicación privilegiada en primera línea de mar , de unas 24 habitaciones, algunas de ellas con una vista directa a nuestro querido mediterráneo.
Para hablar del Hotel Llevant, hay que nombrar a la Familia Farrarons, dueños del hotel desde de los años 30.
Genereración tras generación, la familia Farrarons, procura que el Hotel Llevant sea un hotel de vanguardia , manteniendo su encanto tradicional y ofreciendo una hospitalidad de calidad de aire familiar, cuidando al detalle la atención y el servicio a sus clientes.
La nueva generación de la familia Farrarons decidió recientemente darle un toque moderno y exclusivo al hotel, ofreciendo nuevos espacios reflejos del mundo salino diseñados por Pau LLimona.
Las Estances
Las Estances son unas exclusivas y lujosas nuevas habitaciones ubicadas en la tercera planta del hotel
Son 4 habitaciones con piscinas privada de agua salina climatizada, para disfrutar todo el año, bautizadas cada una por los diferentes vientos del mediterraneo: Xaloc, Migjorn, Garbí y Mestral.
Las tres primeras disponen de unas vistas increíbles de la costa de LLafranc , que hacen que el mismo techo reluzca con el brillo del mediterráneo. Y la habitación Mestral mira hacia las colinas de Llafranc, con una poza de mayor tamaño que las otras.
Cada una de estas habitaciones cuentan con una cama circular de 2,10 m y sábanas de algodón de máxima calidad, cabinas de baño y aseo separadas para cada uso con un diseño de lo más moderno.
Estas preciosas habitaciones las puedes disfrutar desde unos 250€ aprox. en servicio de Alojamiento y desayuno
Este desayuno se sirve en uno de los espacios gastronómicos del mismo hotel. Un restaurante a pie de playa recién reformado donde sirven un desayuno muy completo ofreciendo lo en formato “a la carta” pudiendo escoger distintos productos deliciosos y de calidad.
Dicho restaurante es conocido en Llafranc por su buena oferta gastronómica, donde ofrece una rica gastronomía tradicional del Empordà. Pudiendo disfrutar de aperitivos bajo los pinos y de unas copas escuchando las olas del mar.
Hay otro espacio gatronómico digno de mención, llamado la Blanca , nombre que se remonta al 1935, cuando Maria Gratacós, “la Blanca”, fundó un restaurante con habitaciones al lado de la bahía de Llafranc, llamado “Fonda Levante”. El cual en los años 50, Jaume Farrarons, ahijado de la fundadora, con Montserrat Turró, crearían el hotel LLevant.
La Blanca es un espacio exclusivo en el cual se ofrece distintos menús gastronómicos,donde el producto es el protagonista.
A parte de los exclusivos servicios comentados, en el Hotel Llevant puedes disfrutar de sus otras habitaciones de tradicionalidad marinera y sentirte acogido por la amable recepción y encantador trato familiar de la Familia Farrarons, durante tu estancia.